domingo, 24 de abril de 2011

Herencia Maldita que el Metro Manchate

Está comprobado que lo que con mayor facilidad se hereda son aquellas cosas que nadie quiere, como las enfermedades, los defectos, problemas o aspectos negativos de merecido rechazo.

Esto se puede verificar a diario en distintos escenarios: Si el padre es de buena cabellera pero de piernas delgadas y la madre posee un cuerpo monumental pero el pelo crispado, entonces la niña sale con la mala cata de mami y las canillas de papi.La joven que tiene dos pretendientes, por razones inadmisibles elije al menos dotado y así condena a su decendencia a la miseria.

El recien nacido escoje de sus padres la mayor influencia genetica de aquel que de menos salud goza.

De estos ejemplos esta llena la historia y se ven en todo el mundo, a los cuales no se escapa el Metro de Santo Domingo, el cual en sus primeros dias no presento ningún síntoma, pero ya estan saliendo a relucir algunos rasgos hereditarios propio de la fascinante ciudad donde opera.

Sí, aunque algunos se asombren, nuestro Metro heredó, y como era de esperarse no fué

nada bueno.

Así es que, no se espanten cuando escuchen a uno de sus empleados dirigirse a una larga fila en espera de recarga, para informarle que "misteriosamente" el sisitema se cayó como sucede en cualquier banco de esta ciudad y hasta en la UASD cuando los cajeros ya no quieren trabajar.